Si vienes con hambre este no es el lugar para comer, me trajeron unos tacos dorados en 48 minutos, y una ensalada un poco después. No se quien sea el dueño pero creo que les hace falta gente y organización, las cocineras gritan todo el tiempo y los meseros corren de un lado al otro con las manos vacías, las bebidas salen rápido pero debes esperar mucho si pediste algo de la carta, el sabor es muy bueno pero no recomiendo venir si tienes prisa o tienes un horario laboral muy justo, al final salió alguien de cocina a cobrar con la terminal Y MI COMENTARIO ES HONESTO SIN FINES DE AFECTAR AL NEGOCIO pero si mejoran su organización seguro sería un gran lugar.